El uso excesivo de la fuerza ¿Se justifica?
La brutalidad y uso excesivo de la fuerza por parte de los policías es un tema por demás polémico, no sólo en Tecate o en México – con casos como el de San Salvador de Atenco, mayormente conocido como Atenco– sino en todo el mundo, lo que ha llevado a organismos como Naciones Unidas a hacer recomendaciones e instar a los gobiernos del mundo a que establezcan principios básicos o mínimos para regular el uso de la fuerza que ejercen los cuerpos que se encargan de mantener el orden.
Hace menos de una semana, la Mágica Feria de Tecate terminó y en ella se presentó el Gran Silencio, un grupo de música rock/cumbia conocido en México, y que se utilizó como el escenario en el que un tipo trató de molestar a un par de chicas que disfrutaban del concierto en primera fila. Ante esto, elementos de la policía municipal se acercaron para retirarlo de ahí, por lo que hubo forcejeo pues el tipo se mostró renuente, sin embargo, el uso de la fuerza que hizo el elemento policiaco que se encontraba del lado de interior de la valla fue un tanto excesivo, pues lo golpeó en repetidas ocasiones en las costillas y lo aventó una vez que el hombre estaba del otro lado de la valla.
La reacción del policía puede considerarse como un acto consiente en el que se quiere causar daño más allá de controlar la situación, pues la fuerza está permitida siempre y cuando no se dañe la integridad de la persona ya que, incluso el delincuente más temido de México, tiene derechos y es que independientemente de quien se trate, existen limites dependiendo del grado de amenaza y resistencia que es lo que determina el uso de la fuerza.
El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, establece que nadie puede ser sometido a tratos crueles, inhumanos o degradantes, además de establecer que toda persona privada de libertad será tratada humanamente y con el respeto debido a la dignidad inherente al ser humano, lo que no quiere decir que no se hará justicia y que se tratará con “cariños” a la persona que haya infringido la ley o los derechos de alguien más, como en este caso, sin embargo, los policías implicados pudieron actuar de una manera más estratégica pasandose otro de ellos al lado interior de la valla para ayudar a su compañero o pedir más refuerzos, que efectivamente llegaron pero cuando el que detenido ya ha sido puesto del otro lado de la valla.
“Patear o pegar en las costillas no esta permitido” fue lo que confirmó experto en procedimiento penales por lo que en este caso el policía municipal incurrió en un delito, además de que su actuar habla de las carencias de la capacitación profesional de los policías.
Ante este tipo de violaciones los imputados tienen derecho de denunciar el trato que se les dio al momento de su detención y lo pueden manifestar cuando son llevados a juicio por lo que el juez tiene la obligación de pedirle al Ministerio Público que abra una linea de investigación por abuso de autoridad y posibles lesiones, respetando así los derechos del imputado, sin embargo, no siempre proceden este tipo de peticiones pues otro hecho real es que la mayoría de los detenidos o inculpados alegan, en la mayoría de las ocasiones, haber sido golpeados o que son inocentes.