Por aconsejar invitar a Donald Trump, destituyen a Videgaray
México se encuentra en una crisis política luego de que Enrique Peña Nieto invitara y recibiera en el país a Donald Trump candidato a la presidencia de Estados Unidos que ha formado su popularidad en base a un discurso racista y en contra de la nación mexicana.
Las criticas sobre la decisión del Presidente de México han pululado por todo el país y por el mundo, pues nadie aprobó la acción del mandatario mexicano, incluidos los más prominentes políticos, como Hillary Clinton y la Secretaria de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, quien no toleró dicha acción y renunció a su cargo.
Ante la inminente salida de la funcionaria, quien más que nunca es necesaria, Peña Nieto le pidió que reconsiderara su decisión a lo que Massieu aceptó. Es en este contexto, que el día de hoy se anunció la renuncia de Luis Videgaray, quien estuviera al mando de la Secretaria de Hacienda y Crédito Publico (SHCP).
La salida fue informada esta mañana por la periodista Denisse Maerker y pocos minutos después el área de comunicación de la SHCP confirmó la salida de quien se considera como el principal responsable de que Peña abriera una invitación a dialogar al candidato republicano.
El sucesor de Videgaray es José Antonio Meade Kuribreña, quien hasta ayer dirigía la Secretaría de Desarrollo Social y quien ha pasado por la Secretaría de Relaciones Exteriores, la de Energía y por la de Hacienda y Crédito Público.
Según especialistas en materia económica, este movimiento puede tomarse como un mensaje dirigido a la mejora de las finanzas públicas en cuanto a déficit y deuda se refiere, sin embargo, en el contexto actual, no significa más que un grito desesperado de ayuda a quien tiene experiencia en el ámbito internacional y un fuerte costo político impulsado por Massieu.
El resultado de dicha visita fue desastroso a niveles inimaginables, pues no solo ha afectado la imagen de México a nivel internacional sino también a nivel interno con los movimientos en el tablero político y la desaprobación de la población mexicana que no perdona a Peña Nieto lo recién sucedido. La obligada renuncia de Videgaray, es el primero de los múltiples costos que le pasarán factura al presidente con más baja popularidad en México en los últimos 20 años.
Ni Peña ni Videgaray, midieron el peso que las palabras y sobre todo, el mensaje implícito que las acciones tienen en política exterior . Parece que cuando hay presidentes, vamos a llamarlo, un poco por debajo de la media intelectual (por no utilizar algún calificativo mexicano) es la imagen internacional la que más sufre, como pasó con el famoso “comes y te vas” de Vicente Fox y por supuesto, con esta decisión de Peña Nieto que se recordará como una de las más indignantes de su administración.