Se baja el telón
Por : Gilberto LAVENANT
El miércoles 1 de Junio, concluyó el período de campañas del actual proceso electoral.
Por lo tanto, se puede decir que se baja el telón. Se terminan las simulaciones. Ya nadie tiene que fingir que se preocupan por los ciudadanos de Baja California.
Nada de fotos con niños o ancianos. Nada de sonrisas de oreja a oreja, forzadas.
Nada de tratar de quedar bien con nadie.
El próximo domingo 5 de junio, se sabrá si realmente convencieron o motivaron a los electores.
Ya se ha advertido, estos comicios serán atípicos.
Participan nuevos partidos políticos, debutan los llamados candidatos independientes, cada día es mayor el repudio respecto de los políticos tradicionales, los candidatos partidistas dependen del “voto duro” de sus respectivos partidos, los que cada día son más pequeños. Y las traiciones, están a la orden del día.
Mediáticamente, todos trataron de impresionar a los rivales, con eventos masivos. Los acarreos, siguen funcionando.
Sin embargo, fuera de las redes, las contiendas como que pasaron desapercibidas.
Lo reflejan los resultados de tres encuestas realizadas por Lauro Ortiz y su Plural.mx. Todas, parecen una copia al carbón de la anterior. Los números prácticamente no se movieron.
La primera, realizada del 29 de abril al 2 de mayo. La segunda, del 16 al 19 de mayo, y la tercera del 27 al 29 de mayo. Aunque solamente son una muestra, resulta difícil que cambien el próximo domingo.
A la cabeza de los 12 aspirantes a la alcaldía de Tijuana, aparece René Adrián Mendívil Acosta, candidato de la coalición integrada por PRI, PVEM, PT y Panal, con 23.7%, 22.5% y 22.1% de las preferencias electorales, en cada encuesta.
En el segundo lugar, Juan Manuel Gastélum Buenrostro, candidato del Partido Acción Nacional, quien logró 18.0 %, 17.9% y 20.8%, respectivamente. Con todo y las incómodas adhesiones que presumió. Léase Oscar Morales y sus taxis amarillos, los transportistas conflictivos, Fidel Villanueva Ramírez y su Anapromex y Gabriel González Celestino, identificado ya como “El camaleón”. Cambia de color, sin pudor alguno.
En el tercer sitio, se ubica al militar retirado, Julián Leyzaola, candidato del PES, quien logró 14.4 %, 7.6% y 14.2%. Sus promotores confían en que el día de los comicios dé la sorpresa.
En cuarto lugar aparece Ismael Burgueño, candidato de Morena, quien logra apenas un 5.6% en la primer encuesta, baja a 4.4% en la segunda y sube a 10% en la tercera. Le falta mucho para triunfar.
La decepción de este proceso, lo constituye el expanista Gastón Luken Garza, quien compite como independiente. En la primera encuesta logra el 6.1% de las preferencias electorales, en la segunda desciende al 2.9% y en la tercera sube al 8.3%. Muy lejos las expectativas de un posible triunfo.
En el “sótano”, los demás aspirantes. Obvio que ni en sus casas los conocen. Como se dice comúnmente.
Catalina Salas Bravo, de Movimiento Ciudadano, quien logra 1.0%, 2.7% Y 1.5%, respectivamente.
Otra decepción, la del expanista Héctor Osuna Jaime, candidato del Partido de Baja California, quien logró el 0.7% en la primer encuesta, 2.5% en la segunda y apenas el 1.7% en la tercera.
Octavio González, del Partido Municipalista, logró 0.0% en la primera, 0.7% en la segunda y 0.2% en la tercera. Ni el costo de su participación en esta contienda.
Otra gran decepción, la de la independiente Carolina Aubanel Riedel, quien solamente logra 1.0%, 0.59% y 0.7% en las encuestas. Por pena, debería declinar.
En condiciones similares se encuentran José Medina Crespo, del Partido Peninsular, quien en la segunda encuesta obtuvo 0.0 % y en la tercera el 0.5% y Roberto Proo, que en la segunda y tercera logró 0.0%.
Por último, Vicente Vega, quien solamente aparece en la tercera encuesta y logra tan solo el 2.0%.
La única variable, es el porcentaje de los indecisos. En la primera fue el 28.3%, en la segunda subió al 38.3% y en la tercera bajo hasta el 18 %. Hay quienes tienen la esperanza de lograr el voto de esos indecisos. Difícil, pero la esperanza muere al último.
Total, el miércoles 1 de Junio, concluyó el período de campañas del actual proceso electoral.
Por lo tanto, se puede decir que se baja el telón. Se terminan las simulaciones. Ya nadie tiene que fingir que se preocupan por los ciudadanos de Baja California.