Ni Televisa ni Tv Azteca transmitirán los Juegos Olímpicos de Río
¿Querían competencia? La tienen. Este 5 agosto comienzan los Juegos Olímpicos (JO) de Río de Janeiro 2016 y ni Televisa, ni Tv Azteca podrán transmitir el evento deportivo más importante y esperado por el mundo.
A pesar de que afirman que es por los números rojos en la relación inversión-utilidades (que no ha sido redituable en los últimos Juegos Olímpicos que se transmitieron) por lo que decidieron no ser participes en la cobertura del máximo evento deportivo del mundo, la verdad es que es Carlos Slim, su competencia en el ramo de la telefonía móvil e internet, el hombre más rico de México y el 4to más rico del mundo, compró en marzo de 2013, al Comité Olímpico Internacional, los derechos de transmisión de los JO.
Como muchas de las inversiones de este hombre de negocios, estimada por Sport Business y Repucom en alrededor de 130 millones de dólares, la estratégica compra de los derechos de transmisión de este magno evento resultará en una de sus mejores jugadas (a raíz de la Reforma de Telecomunicaciones y de la promulgación de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión) pues tiene el derecho de transmitirlo en todas las plataformas para 17 países de América Latina por lo que a través de ello pudo revender a Fox Sports, DirectTV, ESPN, entre otras cadenas de televisión de paga.
Pero que no se extienda el pánico, ¡los mexicanos no tendrán de que preocuparse! pues los JO podrán vivirse en la televisión pública por el Canal 22 y Canal 11, además de que quienes tengan acceso a internet podrán ser testigos de todas las competencias en sus tablets y smartphones, a través de las plataformas de Uno TV y Claro Sports, empresas del magnate mexicano.
En lo que corresponde a publicidad, según las estimaciones de MX Sports, el duopolio televisivo de México perderá alrededor de 45 millones de dólares lo que equivale a unos 847 millones de pesos, sin embargo, lo más interesante será, sin duda, la programación que ambas empresas transmitirán durante las 2 semanas de las Olimpiadas, en dónde no podrán más que comentar lo que verán a través de las plataformas de Carlos Slim, contribuyendo directa o indirectamente, a que la competencia se fortalezca.